Situada en el centro del pecho, detrás de la parte superior del  esternón que es el hueso donde la gente toca cuando dice “yo”, queda una pequeña glándula llamada TIMO. Su nombre en griego, thýmos, significa energía vital.

Se trata de un órgano del sistema linfático cuya función primordial es la maduración de los linfocitos T que ayudan al sistema inmune o de defensas, aíslan las células anormales y las destruyen. Además sus células están relacionadas con las del corazón.

Es uno de los pilares de nuestro sistema inmunológico, junto con las glándulas adrenales y está directamente relacionada con los sentidos, la conciencia y el lenguaje.

Su magia radica en reaccionar si alguna toxina o microbio entra en nuestro organismo, produciendo defensas, de ahí la importancia de mantenerla equilibrada y desbloqueada, lista para actuar ante cualquier amenaza.

Numerosas investigaciones han demostrado que esta glándula está fuertemente influida por los estados emocionales.

Una intensa carga emocional negativa puede hacer que disminuya su capacidad hasta en un 50%. Por eso es que después de grandes disgustos, penas o angustias es más probable que se desarrollen enfermedades en nuestro cuerpo.

Además de las enfermedades directamente relacionadas con el sistema inmunológico, las llamadas autoinmunes donde nuestro “ejército interno” se enloquece y termina atacando a tejidos normales de nuestro cuerpo (esclerosis múltiple, la fibromialgia, el síndrome de fatiga crónica, el lupus, etcétera), un desequilibrio en la glándula Timo puede provocar que pesquemos todo tipo de enfermedades, desde gripes, hasta herpes.

La buena noticias es que es muy sensible a las imágenes, colores, luces, olores, sabores, gestos, toques, sonidos palabras y pensamientos, así que podemos influir en ella positivamente de manera fácil a través de pensamientos, emociones y acciones.

Energéticamente asociada  el chakra corazón, considerado fuente energética de amor, unión y compasión, si queremos, podemos ejercitar esta glándula  para aumentar su producción de bienestar y felicidad.

Siendo una glándula tan importante pero en general, tan poco tomada en cuenta, dejo aquí algunas maneras en las que puedes ejercitarla con el fin de mantener tu sistema de defensas elevado ya que su estimulación puede aumentar tu bienestar y la felicidad, lo que a su vez se traduce en salud.

1.- Estimulación directa

• Párate con los pies abiertos a la altura de tus hombros y cadera, las rodillas ligeramente dobladas y suavizando la curva lumbar, pon el peso del cuerpo sobre los dedos y no sobre el talón y mantén toda la musculatura bien relajada.
• Toma algunas respiraciones y exhala por la boca, puedes incluso suspirar en voz alta relajando el pecho, los hombres, la idea es que justo el lugar donde se ubica la glándula Timo quede abierta y sin tensión.
• Cierre una de tus manos y comience a dar golpecitos continuados con los nudillos de los dedos en el centro del pecho, marcando el ritmo así: una fuerte y dos débiles. Siga haciéndolo entre 3 y 5 minutos, respirando tranquilamente, mientras observa la vibración producida en toda la región toráxica con 20 toques por la mañana y 20 toques por la noche es suficiente.

El ejercicio lleva sangre y energía al timo, haciéndolo crecer en vitalidad y beneficiando también los pulmones, corazón, bronquios y garganta. También pueden hacerse pequeños golpes con las yemas de los dedos.

2.- El Sol en el pecho

Desde tiempos muy remotos, los antiguos sabios de Oriente estuvieron conscientes de la relación entre Timo y Salud, por lo tanto diseñaron numerosos ejercicios para fortalecerlo. Uno de los más efectivos es el ejercicio de El Sol en el Pecho.

• Ponte cómodx. Busque su lugar tranquilo y con buena circulación de aire.
• Masajea suavemente el centro de tu pecho, más o menos a la altura donde se juntan el esternón y la clavícula. Visualiza que allí tienes el botón de una flor y que éste se va abriendo despacio a medida que recibe el cálido masaje.
• Con el puño flojo golpee amablemente el centro del pecho. Siga visualizando la flor que se abre.
• Ahora extiende sus brazos hacia adelante, palma frente a palma. Cierre los puños. Esa va a ser la posición de partida.
• Inhala por la nariz en forma lenta y profunda, al mismo tiempo jala los codos hacia atrás, bien pegados al cuerpo. Intenta que los omóplatos se acercan lo máximo posible y que el pecho se abra bien.
• Retén el aire mientras visualizas un sol brillante y poderoso en el centro de tu pecho. Sienta su calor y poder de vida.

Cuando llegues al límite de la retención, exhala por la boca entreabierta, mientras lleva sus brazos a la posición de partida.

Repite la técnica de 5 a 15 minutos.

Si ya tiene problemas en tu sistema inmunológico conviene hacer este ejercicio varias veces al día, todos los días hasta que la mejoría sea evidente.

3.- Construye una emoción positiva a través de la sonrisa

Todxs hemos experimentado como cuando sonreímos, se produce un estado interno de alegría. La sonrisa nos hace sentir bien, optimiza nuestras acciones y produce motivación, influyendo y modificando nuestro entorno. La risa favorece la secreción de neuropéptidos cerebrales. Estas sustancias tienen la capacidad de activar receptores presentes en las membranas de todas las células. Son mediadores de respuestas de tipo químico, que modifican el comportamiento de la célula, como las encefalinas y endorfinas, que provocan una sensación de bienestar al modificar a ciertos receptores para el dolor.

La salud depende de la alegría de vivir.

Así que con esto en mente, procura ir por la vida con una sonrisa en tu rostro, igualmente, no pierdas la oportunidad de reír ante cualquier circunstancia, no la retengas, bloquees o controles, deja salir tus pequeñas o grandes carcajadas y observa como tu entorno también se relaja.

4.- Afirmaciones

Como siempre, contamos con el poder de la palabra para reprogramar esos patrones mentales, conscientes o no, que están jugando en nuestra contra.

Recuerda repetirlas 3 veces seguidas y hacerlo al menos 3 veces al día (en la mañana, en cualquier momento del día y en la noche).

• Confío en mi Yo Superior
• Escucho con amor mi voz interior
• Me libero de todo lo que no es un acto de amor
• <mi energía vital es plena. Estoy llenx de amor

5.- Yoga

 

Hay posturas como la Bhujangasana o la postura de la cobra, que es muy buena ya que abre la región pectoral, justo el sitio donde localizamos el Timo.

 

6.- En Chi kung y en acupuntura, la glándula timo se estimula trabajando el punto Ren Mai 17. Aquí te comparto un video que muestra los ejercicios que te la activan: https://www.youtube.com/watch?v=u0AqKrgxAiM

También recomiendan la activación con golpecitos y masaje pero en lugar de hacerlo directamente sobre la glándula Timo, la sugerencia es hacerlo sobre el punto Ren Mai 17.

 

 

 

 

En general, estos ejercicios nos hacen participes y responsables de nuestra actividad interna, de nuestros pensamientos y emociones y hasta de nuestro sistema inmunológico ¡Llego el momento de subir nuestras defensas!